Por: Pedro A. Hernández R.
En el vasto panorama político, figuras que encarnan los principios democráticos con integridad y dedicación son verdaderas joyas. Tomás Hernández Alberto se alza como uno de esos ejemplos vivientes de un demócrata comprometido, cuyas acciones y convicciones reflejan un compromiso inquebrantable con los valores fundamentales de la democracia.
Desde sus primeros pasos en la arena política, Hernández Alberto ha demostrado un profundo respeto por los principios democráticos y una firme convicción en el poder del gobierno del cambio, desde Movimiento Político Poder PA’L Pueblo. Su trayectoria está marcada por un compromiso constante con la justicia, la igualdad y la participación ciudadana.
Uno de los pilares fundamentales de la plataforma política de Hernández Alberto es la transparencia. Ha abogado incansablemente por una mayor apertura y rendición de cuentas en todos los niveles de gobierno, creyendo firmemente que la transparencia es esencial para fortalecer la confianza pública en las instituciones democráticas.
Además, el profesional de la agropecuaria ha sido un defensor apasionado de la inclusión y la diversidad en la política. Reconoce la importancia de representar a todas las voces y comunidades dentro de la sociedad, y ha trabajado arduamente para garantizar que todas las personas tengan voz y voto en el proceso democrático.
Su compromiso con la justicia social y los derechos humanos también ha sido una característica distintiva de su carrera política. El dirigente político ha luchado incansablemente contra la discriminación, la injusticia y la desigualdad en todas sus formas, abogando por políticas que promuevan la equidad y la dignidad para todos los ciudadanos.
Hernández Alberto ha ocupado diversos cargos de importancia en la escena política dominicana, destacándose como tres veces vocero del extinto líder de masas José Francisco Peña Gómez, dos veces diputado, fundador del premio Nacional de la Juventud, vocero oficial del expresidente Hipólito Mejía, tres veces regidor del Ayuntamiento del Distrito Nacional, exadministrador del Banco Agrícola, exdirector del Instituto Agrario Dominicano y presidente del Movimiento Poder PA’L Pueblo.
Su extensa experiencia y dedicación a la causa democrática lo consolidan como una figura ejemplar en la historia política de la República Dominicana.
En un mundo político que a menudo está marcado por la división y el partidismo, la figura de Tomás Hernández Alberto brilla como un faro de esperanza y coherencia. Su compromiso inquebrantable con los principios democráticos, su defensa de la transparencia y la inclusión, y su lucha incansable por la justicia y los derechos humanos lo convierten en un verdadero demócrata a carta cabal.